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Soy un preparacionista, pero no como te piensas (y con Ferrari y Porsche en el punto de mira)


Dentro de mi cabeza hay caos. Mil ideas (999 de las cuales no llevan a ningún sitio), mil pensamientos, 10.000 chistes malos dispuestos a atacar... Suelo estar maquinando cosas que, luego, se quedan como la espuma de la cerveza que te echas en el vaso de mala manera: en la nada más absoluta y ridícula.
 
A veces escribo mentalmente las pruebas y reportajes pendientes y, cuando me pongo delante del ordenador, intento rescatar esas ideas que muchas veces no puedo recordar.

Pero aunque soy un poco caótico y desordenado, la verdad es que tengo algo muy claro. Soy un preparacionista... aunque probablemente no como te piensas.

El preparacionismo, survivalismo o bushcraft es una tendencia en la que sus seguidores se preparan para afrontar todo tipo de emergencias, desde una Filomena a traición hasta una posible guerra nuclear.

 

A mí me gusta mucho la naturaleza, la acampada, las rutas por la montaña, sí, pero no soy de esos. Aunque podría sobrevivir porque he visto las 11 temporadas de The Walking Dead y sé cómo funcionan las cosas ahí fuera, yo me preparo desde el punto de vista automovilístico. Me explico.

Imagínate que un día tonto compruebas el Euromillón y resulta que te han caído 150 millones de euros. ¿Qué haces?


Yo lo tengo bastante claro. Lo primero, correría a por un Porsche 356. Quizá dos, porque uno de ellos recibiría una conversión a eléctrico. ¿Que por qué? Porque los ricos hacemos cosas estrafalarias y, además, así te la dejo botando para que me mandes algún correo faltón de esos que tanto me reconfortan.

Un Porsche 911 no se discute, eso está claro. Un GT3 de la generación anterior me vuelve loco

 

Y seguramente haría como el que pagó más de tres millones de euros en la primera gran subasta del año por uno de mis grandes mitos: el Ferrari F40.

Pero claro, para ir y venir de gestionar mis múltiples propiedades en la ciudad, necesitaría un buen eléctrico (aparte del 356). Seguramente fuera el nuevo Porsche Macan que se presentó hace unos días porque al final los colores le tiran a uno. 

También un todoterreno en condiciones porque está claro que me compraría una buena finca en alguna zona de montaña. Me gustó bastante el Ford Bronco, como puedes ver en este vídeo que terminé de grabar JUSTO antes de quedarme empanzado, aunque para ganarme a mi hijo preadolescente (creo que no lo voy a poder superar), quizá opte por el Ranger Raptor, que es su coche favorito.

¿Más? Lógico: algo más flexible. Una Harley Heritage Classic, que soy un nostálgico de los velocímetros con aguja y cosas así. Vale, no corre, no frena... Pero puedes avanzar mejor cuando hay atasco. Y qué estilazo.

¿Más? Claro: para mis bicis necesitaría una furgo. Una Sprinter preparada al estilo de la Bruce Banner 4x4 SAS por si tengo que ir por zonas apocalípticas.

Y poco más porque yo creo que, aparte de preparacionista, soy bastante humilde. Unos pocos millones de euros de nada en chapa y ruedas. Ahora, eso sí, me queda lo mejor: empezar a comprar algún décimo. Soy el preparacionista menos preparado.

 

Hace unos días estuve en la presentación del BYD Seal U en Cascais, al norte de Lisboa. Es un SUV eléctrico de los de "ojocuidao", porque viene fuerte. 

Para variar, pensaba en el tema de los eléctricos, que no acaban de arrancar y eso que el Tesla Model Y se convirtió en 2023 en el coche (a secas) más vendido del mundo.

Yo tengo localizados estos problemas: 
  • Inestabilidad de los cargadores: se desconectan sin avisar, no alcanzan las potencias de cargas anuncias, se comunican bien con la app en cuestión...
  • ... lo que me lleva a otro handicap: las 500 aplicaciones que necesitas para cargar tu coche según dónde estés y cada una a un precio diferente.
  • Hilo con lo anterior: no hay política de precios. Sabes más o menos cuánto te cuesta un litro de gasolina y en la estación de servicio te lo pone bien claro. Eso no pasa en las estaciones de carga.
  • El repostaje es poco flexible: necesitas calcular demasiado. Algunas operadores te obligan a decidir cuántos kW quieres recargar. O el precio. ¿Por qué no se puede pagar con un datáfono cono en las gasolineras de siempre?
No sé si estarás de acuerdo con estos problemas o si te llama la atención que la autonomía no me suponga algo negativo: pienso que si te compras un eléctrico es porque te cuadra y eso lo tienes más que estudiado y asumido.
 


Ah, los coches eléctricos. Menuda controversia. Es como cuando del caballo se pasó al automóvil. Los partidarios decían que era más ecológico porque no hacía sus necesidades en medio de la calle (eso debía de ser un drama), mientras que los detractores decían que hacía ruido y era aparatoso. 

Sin embargo, quizá deberías ser sincero contigo mismo: ¿te vas en verano al pueblo y el resto del tiempo lo pasas en tu entorno, de casa al trabajo y viceversa? Ya aparecen eléctricos muy dignos como primer coche (y con precios cada vez más aceptables)...

 


Desde la última vez que te conté cosas que no necesitabas saber, han pasado por mis manos coches de lo más dispar. De ellos, me quedaría con dos: un Dacia Jogger de gas que me ha parecido una opción superinteresante por precio y etiqueta medioambiental. 

Y luego, otro modelo que ya he mencionado unas líneas más arriba: el Ford Ranger Raptor diésel. Me encanta por su estilo y porque, aunque mida 5,39 metros y tenga reductora, es un deportivo con todas las de la ley, aunque este sea feliz rodeado de charcos y barro...

 

Seguro que la vida te atropella y no te da tiempo a leer temas que de verdad merecen la pena. No pasa nada, porque para eso estamos aquí. Seguro que estos que he seleccionado de las webs que hacen mis compañeros te gustan:


🔑 El truco oculto para abrir y arrancar el coche en una zona con inhibidores de frecuencia

💰 Los gastos de Tesla: de los 1.200 millones en reparaciones al agujero negro en marketing

📈 El inesperado dato que coloca a los coches eléctricos por encima de los diesel

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💥 Praga: desde coches a tanques, camiones de Dakar y superdeportivos

"Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no tienen por qué coincidir necesariamente o exactamente con la posición de Axel Springer o de Auto Bild."

Luis Guisado estudió periodismo para poder trabajar en una revista de coches y poder conducir todos los modelos del mercado, algo que se puede decir que ha conseguido (más o menos). Trabaja en esta santa casa desde 2005, primero en AUTO BILD España, donde sigue publicando pruebas de cuando en cuando y se siente como en casa, y luego en TOP GEAR España, donde lleva las riendas de un carruaje ocupado por otros locos de las ruedas. Si quieres intercambiar opiniones con él puedes hacerlo en su Twitter.

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